Vesper Martini
- Flanagan
- 21 jul 2016
- 3 Min. de lectura

La cosa no es andar por ahí a la voz de ‘Un Martini’ así como así en cuanta barra nos reciba a la tardecita o nochecita, sea en el bar de un hotel o pub ocasional. Si hay algo que nos enseña el cine, es que cuando alguien llega a un bar y se acerca a la barra, lo primero que hace es saludar al barman y no importa si sos un bellaco hijo de una gran siete, el padre del año o patch adams, incluso, no es menor el dato que esclarece que alguna que otra madre y desde hace algunos años también lo sugieren como un acto de cortesía y buena educación aquello de saludar cuando se llega a algún lugar.
En cuanto a la idea que el cine nos proporciona conocimiento y educación, esta vez es oportuno considerar el hecho como cierto e incluso es posible estimar un mínimo agradecimiento ante el acercamiento de conceptos, métodos sutiles y positivos a través de la secuela de James Bond que además son impartidos por el mismísimo agente secreto codificado con el número 007.
El ex comandante de la Marina Real Británica, ilustra al público masculino desde hace más de cincuenta años, y el concepto es que un caballero, al presentarse y para ser cool, tiene que anteponer el apellido, hacer un pequeño silencio y luego pronunciar el nombre completo, iniciando con los de pila. La efectividad del mencionado formato debe procurar solo uno o dos nombre cortos en caso de poseerse varios mas y finalmente, el apellido es correcto pronunciarlo con igual tono y cadencia que la primera vez. También es vital entender que se debe destacar la cordialidad en el trato para con las damas, señoritas e incluso malvadas y/o cuanta atorranta se cruce. Ser un caballero siempre es la opción, mantener la calma es una táctica que permite resolver cualquier situación y, a la hora de beber, un 'Vesper Martini' es un cóctel ideal, sofisticado, intrépido y eficaz tanto para para saborear como para iniciar una conversación.
En 1953 el novelista ingles Ian Fleming hizo que el bueno de Bond, James Bond, pidiera un ‘Martini’ pero no era uno cualquiera, uno clásico, uno que podía pedir Eliot Ness o un agente de C.I.P.OL., en Casino Royale, el bueno de Jamie pide un Dry, y con una variación de la cual brinda la receta al presto barman y finalmente lo nombra en alusión a la doble agente femenina Vesper Lynd. De esta manera, dio nombre propio a esta innovación del cóctel y de esa manera comenzó a trazar un camino de fama.
Sin lugar a dudas Don Fleming tuvo gran imaginación, proporcionó al mundo de una novedad digna para los amantes del Dry y pocas son las conjeturas sobre la ardua investigación y sacrificadas experimentaciones y ensayos de coctelería para que ese pasaje del libro lograra el clima perfecto. La sutil interpretación del cóctel permite pensar que el bueno de Ian, supo que el 'Vesper' sería mas que un cóctel y se convertiría en un dispositivo estratégico en cualquier sistema de aventura, acción y seducción.

Tres partes de Gordon’s, uno de vodka y medio de Kina Lillet y se agita enérgicamente hasta que se enfríe como el hielo, se sirve en una copa honda de champagne y se le añade una fina y larga tira de piel de limón.
Lo has anotado?... fue la pregunta de 'J.B.' al camarero. Te pregunto lo mismo aunque en realidad no es importante la respuesta, si considerar que cosas pasan en las películas y a veces de forma similar en la vida real. Como aquella vez que pedí un 'Vesper' en la barra del hotel de la blonda nietita y no sabían la receta. Si es importante aclarar que ni bien llegue y me acomodé en la barra, saludé corresponde. Anotalo, preparate uno y si es posible, alguna vez también, date el gusto de pedirlo para que te pregunten la receta.
Flanagan
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